En respuesta a la "carta abierta" escrita por J.M.A.P.

Estimado J.M.A.P.: Paz y Bien

Quisiera darte las gracias por esa carta que has escrito y hecha pública en este medio.
Es verdad que Benissa es para mí como mi segundo pueblo; aquí me he sentido como en mi propia casa: acogido y querido.

Soy consciente de mis propias debilidades y limitaciones, pero tengo que dar gracias al Señor que se ha servido de mi humilde persona para hacerle presente en medio de vosotros.
Tengo que decirte que he aprendido mucho de Benissa, me habéis dado mucho más vosotros a mí que yo a vosotros.

He intentado mostrar, a todos los que han acudido a mí, el rostro misericordioso de nuestro Padre Dios.

Las paredes del Convent son testigos de mucha gente, creyente o no, que habéis venido a buscar una palabra de aliento, de esperanza; otros  habéis venido a consultar un problema en busca de luz, otros en busca de reconciliación a través del Sacramento de la Reconciliación, otros a compartir la fe, otros a presentar vuestras ilusiones o proyectos…. A todos he intentado acoger, escuchar, animar… Doy gracias a Dios porque se ha servido de mí para llenaros de su paz y alegría. Pido perdón si a alguno os he defraudado o no he sabido daros lo que buscabais.

Es verdad que me sabe mal dejaros, pero soy hijo de obediencia, y hoy me envían a trabajar en otra parcela de la viña del Señor, pero no me voy solo, me llevo vuestra amistad, vuestro cariño y puedo decir que sois parte de mi vida y siempre tendréis un lugar en mi corazón.

Quisiera terminar dándote las gracias por tus palabras, que estoy seguro que nacen de lo más hondo de tu corazón y aprovechar para decirte a ti y a todos los beniseros:

GRACIAS Y HASTA SIEMPRE.                                                              

 Fr. Jordi Escrivá.