Benissa un minuto de mar

 

Un minuto de mar, no es un tiempo perdido, es recuperar los recuerdos que yo  creía perdidos.  Un minuto de mar pensando en aquellos amigos que hoy no están, pero que nunca se fueron, en realidad, siempre están conmigo.  Un minuto de mar escuchando su sonido que se mezcla con mi silencio para escribir nuevas notas que me hacen sonreír de nuevo.  Un minuto de mar, para volar lejos, tan lejos que no tenga  tiempo de mirar atrás y ver la realidad de este mundo tan complejo.  Un minuto de mar es mucho más de lo que quise, de lo que pido, de lo que anhelo.  Un minuto de mar, para volver a sentir que la sangre y la vida recorre todas y cada una de las partes de mi cuerpo.  Un minuto de mar pensando en todo lo que yo he vivido, y la vida que  permitió las cosas que ocurrieron.  Un minuto de mar  para gritar, llorar, reír, saltar, andar, correr, respirar, jadear, oler, tocar, cantar, hablar, pensar…  Un minuto de mar de sensaciones que me recorren sin apenas darme cuenta de que hoy vuelvo a ser feliz.  Un minuto de mar en Benissa, un minuto de mar en mi pueblo.

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