¿Y ahora qué?
De aquellos polvos vienen estos lodos
Cuán sabio es el refranero español para simplificar aquello que queremos resumir.
De aquellos polvos vienen estos lodos
afirma que los grandes problemas tienen, por lo común, su origen en
pequeños errores o faltas cometidos con anterioridad, que se van
agrandando como una bola de nieve.
Esto es lo que hoy podríamos
resumir de nuestra clase política desde el principio de los tiempos en
los que esta (sin duda) loable profesión al servicio de los ciudadanos
viera la luz.
Pero…¿Qué es la política?![[Img #7342]](upload/img/periodico/img_7342.jpg)
Déjenme citar algunas de las múltiples acepciones que nos encontramos en la RAE:
- Que interviene en las cosas del gobierno y negocios del Estado.
- Arte, doctrina u opinión referente al gobierno de los Estados.
- Actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos.
Dicho de otro modo, La política, del griego πολιτικος (pronunciación figurada: politikós, «ciudadano», «civil», «relativo al ordenamiento de la ciudad»),
es la actividad humana que tiene como objetivo gobernar o dirigir la
acción del Estado en beneficio de la sociedad. Es el proceso orientado
ideológicamente hacia la toma de decisiones para la consecución de los
objetivos de un grupo.
¿A que viene esta perorata?
Todo
esto viene a cuento para recordar al político que cree estar por
encima del ciudadano, que es precisamente este último quien le ha puesto
donde se encuentra.
Hablando de recordar. No somos nosotros
quienes debiéramos de recordarles a todos los que eligen esta profesión
que los abrazos y las promesas que se convierten en aguas de borrajas,
más tarde o más temprano terminan por pasar factura y para los que
quieran leer entre líneas no me estoy refiriendo a promesas de personas
concretas, sino a promesas al conjunto de la sociedad.
El color
político aquí es lo de menos, pues todos sin excepción prometen más de
lo que en realidad pueden cumplir. Las excusas siempre suelen tener un
denominador común y está es la administración y la burocracia (tan
lenta) con la que uno se encuentra al ocupar un determinado cargo, que
no me negarán que es el colmo de la ironía, culpar al trabajador de lo
que ocurre, cuando son los mismos políticos los que deciden el modelo de
funcionamiento, el personal necesario, sueldos, horarios, etc.
Visto lo visto, retomo el principio de mi escrito y me ciño a la sapiencia de nuestro refranero: De aquellos polvos vienen estos lodos.
Y es que ningún político que hoy gobierna quiere culparse de la gestión
de sus antecesores, bien sean del mismo color o la de cualquier otro. Así es como los pequeños errores a modo de toma de decisiones
equivocadas y no rectificadas, hoy son la causa del problema con el que
nos encontramos.
¿Ahora qué?
Ahora
a seguir trabajando que somos nosotros los ciudadanos los que debemos
de empujar y hacer que esto funcione, que al fin y al cabo es lo que
hemos estado haciendo durante siglos.
Cuán sabio es el refranero español para simplificar aquello que queremos resumir.
De aquellos polvos vienen estos lodos
afirma que los grandes problemas tienen, por lo común, su origen en
pequeños errores o faltas cometidos con anterioridad, que se van
agrandando como una bola de nieve.
Esto es lo que hoy podríamos
resumir de nuestra clase política desde el principio de los tiempos en
los que esta (sin duda) loable profesión al servicio de los ciudadanos
viera la luz.
Pero…¿Qué es la política?![[Img #7342]](upload/img/periodico/img_7342.jpg)
Déjenme citar algunas de las múltiples acepciones que nos encontramos en la RAE:
- Que interviene en las cosas del gobierno y negocios del Estado.
- Arte, doctrina u opinión referente al gobierno de los Estados.
- Actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos.
Dicho de otro modo, La política, del griego πολιτικος (pronunciación figurada: politikós, «ciudadano», «civil», «relativo al ordenamiento de la ciudad»),
es la actividad humana que tiene como objetivo gobernar o dirigir la
acción del Estado en beneficio de la sociedad. Es el proceso orientado
ideológicamente hacia la toma de decisiones para la consecución de los
objetivos de un grupo.
¿A que viene esta perorata?
Todo
esto viene a cuento para recordar al político que cree estar por
encima del ciudadano, que es precisamente este último quien le ha puesto
donde se encuentra.
Hablando de recordar. No somos nosotros
quienes debiéramos de recordarles a todos los que eligen esta profesión
que los abrazos y las promesas que se convierten en aguas de borrajas,
más tarde o más temprano terminan por pasar factura y para los que
quieran leer entre líneas no me estoy refiriendo a promesas de personas
concretas, sino a promesas al conjunto de la sociedad.
El color
político aquí es lo de menos, pues todos sin excepción prometen más de
lo que en realidad pueden cumplir. Las excusas siempre suelen tener un
denominador común y está es la administración y la burocracia (tan
lenta) con la que uno se encuentra al ocupar un determinado cargo, que
no me negarán que es el colmo de la ironía, culpar al trabajador de lo
que ocurre, cuando son los mismos políticos los que deciden el modelo de
funcionamiento, el personal necesario, sueldos, horarios, etc.
Visto lo visto, retomo el principio de mi escrito y me ciño a la sapiencia de nuestro refranero: De aquellos polvos vienen estos lodos.
Y es que ningún político que hoy gobierna quiere culparse de la gestión
de sus antecesores, bien sean del mismo color o la de cualquier otro. Así es como los pequeños errores a modo de toma de decisiones
equivocadas y no rectificadas, hoy son la causa del problema con el que
nos encontramos.
¿Ahora qué?
Ahora
a seguir trabajando que somos nosotros los ciudadanos los que debemos
de empujar y hacer que esto funcione, que al fin y al cabo es lo que
hemos estado haciendo durante siglos.





















Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.27