Reflexión acerca del artículo del País, donde se habla de Juan Bautista Roselló, alcalde de Benissa

Me hago eco de una noticia, que verdaderamente como ciudadano de Benissa, ¡qué quieren que les diga!, al menos para mí es motivo de reflexión.

 La noticia la pude leer en Infobenissa, pero la fuente original es el Periódico Digital del País. El titular de la noticia reza así:

 Normalmente mis artículos de opinión son directos y no suelo morderme la lengua ante determinadas situaciones del pueblo, y en esta ocasión  no voy a ser menos.

Yo entiendo que con una población de poco más de 13.000 habitantes, como ocurre en  nuestro pueblo,  debiera de ser ejemplo de gestión clara y eficaz, pero cuando leo estas cosas, se me ponen los pelos como escarpias.

 La política mueve cantidades ingentes de dinero, y cuando uno está situado en las esferas del poder, de una u otra forma, la vida se ve de otra manera.

Llegas a sitios donde te abren las puertas de par en par, no pagas aquí, no pagas allá, comes “de gorra” en muchísimos sitios, tu agenda de contactos se convierte en un arma de presión en determinados asuntos y temas comarcales o locales, además de poder presumir de cobrar diferentes sueldos a través de las múltiples empresas públicas de las que vas siendo presidente, vocal, asesor o como quiera llamarse el cargo que pasa el político de turno a  ocupar, claro que en unas no cobran nóminas completas o parciales, pero las dietas al fin y al cabo son emolumentos así que no nos olvidemos de este singular pago por asistencia o por la colaboración laboral prestada.

 Después claro y lógicamente, está  el cobro por ser alcalde o concejal, por asistir a los plenos, más  dietas, los pagos por  asistir a actos festivos, cursos de tal o cual con los gastos de kilometraje y  de nuevo más dietas  pagadas, hoteles en ferias con otra vez de nuevo los  pagos a cargo del  consistorio de todo absolutamente todo para que el político nada tenga que poner de su bolsillo (faltaría más con esa miseria de sueldos), etc.

Esto significa que todos estos gastos ocasionados, están pagados por el ciudadano de Benissa a través de sus impuestos, pues así se desprende de los presupuestos.

Como verán seguro que me dejo pagos que ni por asomo a alguno de los lectores se les ocurriría pero que están previstos a través de las mil fórmulas legales que existen para no declarar estos pagos como sueldos o mejor digamos la nómina oficial, la que ellos con gran arte dicen que eso es lo que oficialmente cobran.

Este arte al que me refiero, es cuando estos  mismos políticos se precian de decir públicamente  que “solo” cobran 50.000 € como si eso fuera poco, obviando   dietas, kilometrajes, y otros tantos cobros “legales” que les pertenecen que hacen que sus emolumentos suban y suban como la espuma.

Cuando la mayoría de los benisseros apenas si cobran los 1.000 € mensuales, o lo que es lo mismo apenas si llegan a los 12.000 € a 15.000 €  al año, eso los afortunados, porque hay que cobran mucho menos,

 Y claro, llegan estás noticias y  a uno se le quita la poca fe que  de por sí ya tengo  para con  los políticos.

 Recordar que cuando os ocurra algo que pueda ser arreglado  y zanjado desde la alcaldía, este mismo político, con una amplia sonrisa y  con buenas y zalameras palabras te “dará la vuelta” para que te vayas pensando que te has llevado el premio al “más jilipollas” y  que según parece ¡encima!  las cosas están arregladas y todo esto sin despeinarse que ya es difícil.

¡Eso sí!

La próxima vez que me pidan el voto, les voy a recordar que puestos a ser “jilipollas” el voto de quien suscribe será para quien se lo merezca y trabaje por y para el pueblo y no  en  beneficio propio.

¡Qué esto que digo no es así!  A mí sí me lo parece y como cada uno es libre de pensar lo que  quiera, pues nada; pero tranquilo, que la cosa ya está arreglada, seguro que esto es todo mentira, así que mis consideraciones para tanta difamación gratuita, porque ya sabe  que estos chicos de la prensa, se inventan muchas teorías y conspiraciones judeo masónicas.